Tras la celebración del triduo durante los días 30 y 31 de marzo, y 1 de abril, la Hermandad Salesiana del Prendimiento estaba dispuesta a celebrar la Función Principal recogida en las Reglas Estatutarias en el IV Sábado de Cuaresma. La cita era a las siete y media de la tarde del día 2 de abril en la Iglesia de María Auxiliadora, sede de la Hermandad, donde ya todo estaba preparado y programado para recibir a los hermanos y devotos de la Cofradía.
Las imágenes de Nuestro Señor Jesucristo en Su Prendimiento y María Santísima del Auxilio, presidían sus respectivas capillas, especialmente ornamentadas para el acontecimiento, y magníficamente vestidos por sus vestidores. A los pies de ambas imágenes se situaban, respectivamente, las reliquias de nuestro Titular San Juan Bosco y Santo Domingo Savio. En el templo se respiraba el ambiente cofrade y salesiano que caracteriza a la Hermandad del Miercoles Santo.
Puntualmente, se inicia la ceremonia con la procesión claustral del Santísimo Sacramento. El desarrollo de la misma fue presidida por el director espiritual de la Hermandad, don Antonio Rodríguez Fenoy quién ensalzó la labor de la Hermandad. Durante su desarrollo, los hermanos renovamos e hicimos pública protestación de nuestra fe, y durante la Comunión, escuchamos la marcha dedicada a Nuestro Titular Cristífero, interpretada por su compositor, don José Manuel Cano.
A continuación, los hermanos siguieron el encuentro en la cena de hermandad que se celebró con posterioridad, en la que la conversación sobre los próximos actos de la Hermandad, fueron los protagonistas.
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