En la madrugada del Miércoles Santo, la Hermandad Salesiana del Prendimiento, cumplió diez años. Y con motivo de esta efeméride, escribimos estas líneas.
Queremos ante todo agradecer, a la comunidad salesiana su cariño y su acogida. Como padres, son guía y ejemplo de vida de esta hermandad que apenas acaba de empezar a dar sus primeros pasos. A D. José Antonio, por su paciencia infinita para con nosotros, a D. Felipe por sus palabras al oído, a D. Antonio R. Fenoy por su alegría y su apoyo, a D. Curro por sus consejos, y a D. Antonio Ortiz por su generosidad. Ellos nos abren cada día las puertas de su corazón y de su casa, para compartirlos generosamente con nosotros. GRACIAS.
A todos los que fueron, son y serán parte de esta historia; la historia de una hermandad que empieza a caminar por su segunda década. GRACIAS.
Con un camino andado del que aprender y un futuro por construir, nos enfrentamos a una nueva etapa. Nuestra perspectiva es muy positiva, pues tenemos ya un hueco en esta ciudad de Semana Santa, y empezamos a sentir el cariño que se necesita para crecer. Hay que seguir formándose, trabajando y reflexionando sobre lo trabajado. No estamos solos. Nuestra madre del Auxilio, nos guía de la mano, siempre a un lugar mejor. Nuestra Madre y Maestra ilumina el sendero a seguir.
Nos disponemos como jóvenes a seguir dando testimonio de nuestro absoluto e incondicional amor al Padre. En estos tiempos difíciles para la cristiandad, nos comprometemos a ser valientes, coherentes y firmes en nuestra fe. Nos comprometemos a seguir haciendo hermandad de la mejor forma que sabemos: con juventud y alegría.
Con ilusión esperamos la llegada del icono y la cruz al colegio salesiano, que a buen seguro servirá de acicate y estímulo de lo que sin duda será un punto de inflexión en la vida de los jóvenes que seguimos a Cristo. En este, nuestro décimo aniversario fundacional, recordamos a Don Bosco, sabiéndonos queridos por él, por el simple hecho de ser jóvenes. ¡GRACIAS!
Queremos ante todo agradecer, a la comunidad salesiana su cariño y su acogida. Como padres, son guía y ejemplo de vida de esta hermandad que apenas acaba de empezar a dar sus primeros pasos. A D. José Antonio, por su paciencia infinita para con nosotros, a D. Felipe por sus palabras al oído, a D. Antonio R. Fenoy por su alegría y su apoyo, a D. Curro por sus consejos, y a D. Antonio Ortiz por su generosidad. Ellos nos abren cada día las puertas de su corazón y de su casa, para compartirlos generosamente con nosotros. GRACIAS.
A todos los que fueron, son y serán parte de esta historia; la historia de una hermandad que empieza a caminar por su segunda década. GRACIAS.
Con un camino andado del que aprender y un futuro por construir, nos enfrentamos a una nueva etapa. Nuestra perspectiva es muy positiva, pues tenemos ya un hueco en esta ciudad de Semana Santa, y empezamos a sentir el cariño que se necesita para crecer. Hay que seguir formándose, trabajando y reflexionando sobre lo trabajado. No estamos solos. Nuestra madre del Auxilio, nos guía de la mano, siempre a un lugar mejor. Nuestra Madre y Maestra ilumina el sendero a seguir.
Nos disponemos como jóvenes a seguir dando testimonio de nuestro absoluto e incondicional amor al Padre. En estos tiempos difíciles para la cristiandad, nos comprometemos a ser valientes, coherentes y firmes en nuestra fe. Nos comprometemos a seguir haciendo hermandad de la mejor forma que sabemos: con juventud y alegría.
Con ilusión esperamos la llegada del icono y la cruz al colegio salesiano, que a buen seguro servirá de acicate y estímulo de lo que sin duda será un punto de inflexión en la vida de los jóvenes que seguimos a Cristo. En este, nuestro décimo aniversario fundacional, recordamos a Don Bosco, sabiéndonos queridos por él, por el simple hecho de ser jóvenes. ¡GRACIAS!
Cofradía Sacramental y Hermandad Salesiana de Nuestro Señor Jesucristo en Su Prendimiento, María Santísima del Auxilio, San Juan Evangelista y San Juan Bosco.